domingo, 16 de junio de 2019

¿Está avanzando la Ciencia Política?

También pueden leer el artículo publicado en la página de Politólogos Digitales en el siguiente enlace: https://web.facebook.com/notes/politólogos-digitales/está-avanzando-la-ciencia-política/2252049088197019/


La Ciencia Política es una carrera profesional relativamente nueva en nuestro país, con un origen accidentado e interrumpido en el siglo XX, logra iniciar una nueva etapa en 1988 con la formación de la Escuela Profesional de Ciencia Política en la Universidad Nacional Federico Villareal. Con el cambio de siglo, nuevas escuelas profesionales iniciarían actividades en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos en el año 2002, en la Pontificia Universidad Católica del Perú en el año 2005 y en la Universidad Antonio Ruiz de Montoya en el año 2007.

En los siguientes años, la oferta educativa en Ciencia Política seguirá aumentando, ahora fuera de la ciudad de Lima, con la formación de escuelas profesionalesen la Universidad Nacional Micaela Bastidas de Apurímac en el año 2011, en la Universidad Nacional de Trujillo en el año 2012, en la Universidad Nacional Pedro Ruiz Gallo de Lambayeque en el año 2013 y finalmente en la Universidad Católica Santa María de Arequipa en el año 2016.

Sin duda si nos fijamos a un nivel cuantitativo, la enseñanza en ciencia política ha tenido un crecimiento, pasamos de tener una sola escuela profesional en el año 1988 a tener 8 escuelas profesionales en el año 2018, aumentando así con el transcurrir de los años la cantidad de alumnos que ingresan y egresan de todas estas casas de estudio. Pero este crecimiento tiene importantes límites si lo vemos desde un nivel cualitativo, la formación de escuelas profesionales en ciencia política ha ido acompañada por serios problemas como la falta de actualización de la currícula académica y su desconexión con la demanda laboral, la falta de docentes especialistas en sus materias, el limitado apoyo institucional de las propias universidades hacia las escuelas profesionales, entre otros; problemas muy presentes en la universidades públicas pero que también suceden en las universidades privadas.

A pesar de lo mencionado anteriormente, se han presentado algunos progresos en la formación de comunidades académicas con el desarrollo de coloquios universitarios y el macrocoloquio de estudiantes de ciencia política organizados por los propios estudiantes, con la creación de la Red Universitaria Nacional de Escuelas de Ciencia Política (RUNAECIP) para intentar mejorar los mecanismos de comunicación entre las escuelas profesionales de Ciencia Política e institucionalizar los Congresos Nacionales de Ciencia Política en el Perú, y con la participación de delegaciones universitarias en los Congresos Nacionales de la especialidad en Colombia, Ecuador, Chile, Uruguay, Argentina y en los Congresos Latinoamericanos organizados por la Asociación Latinoamericana de Ciencia Política (ALACIP).

De esta manera, las comunidades académicas (conformada por alumnos, docentes y egresados) de ciencia política se han adelantado mediante sus propios esfuerzos a las propias escuelas profesionales de Ciencia Política, que por problemas institucionales tanto internos como externos, avanzan a una velocidad mucho más lenta. Las comunidades académicas se empiezan a colocar a la vanguardia del desarrollo de la Ciencia Política, pero sin el acompañamiento institucional de las casas de estudio estos loables esfuerzos pueden naufragar; tengamos en cuenta que solo con el aporte de todos los involucrados lograremos que la Ciencia Política avance realmente.

domingo, 7 de abril de 2019

¿Qué significa ser un politólogo?


También pueden leer el artículo publicado en la página de Politólogos Digitales en el siguiente enlace: https://web.facebook.com/notes/polit%C3%B3logos-digitales/qu%C3%A9-significa-ser-un-polit%C3%B3logo/2165474116854517/


En los últimos 10 años, los politólogos se han ido visibilizando ante mayores sectores de la población, debido en parte a la mayor presencia de estos profesionales en diferentes medios de comunicación (televisión, radio, prensa escrita, etc.) tratando de analizar y explicar por un lado los diferentes hechos políticos coyunturales y por otro lado los procesos más complejos que se relacionan con el sistema político, el Estado y la sociedad de nuestro país.

Teniendo en claro esta primera aproximación al tema, debemos estar preguntándonos, ¿qué significa ser un politólogo? En primer lugar, es importante aclarar que ser politólogo no es lo mismo que ser político. Todo ciudadano que así lo desee, sin importar su profesión u oficio, puede ser político, pero solo los profesionales que estudian ciencia política son politólogos.

Estudiar Ciencia Política le permite al politólogo conocer y aprender sociología, gestión pública, antropología, historia, psicología política, derecho, relaciones internacionales, comunicación política, administración pública, economía, entre otras disciplinas relacionadas con las relaciones de poder y con la gestión de los asuntos de interés público; dándole al politólogo la oportunidad de observar su alrededor de forma crítica y global.

Debido a esto, el politólogo tiene la opción de desempeñarse en diferentes campos laborales como son la evaluación, gestión y desarrollo de políticas públicas, la gestión y asesoría en comunicación política y de gobierno, la investigación social y científica, la docencia universitaria, y la consultoría en empresas e instituciones privadas que tienen una relación más próxima al Estado y a la sociedad.

De esta forma, los politólogos pueden contribuir y aportar a la mejora del Estado, a la eficiencia de los gobiernos, al correcto funcionamiento del sistema político y a la solución de los principales problemas de la sociedad peruana, que forma parte de un mundo cada día más globalizado y se enfrenta a un contexto de cambios propio de la era digital que vivimos.